¿Por qué las mujeres sienten presión por ser madres?
¿Acaso es de obligado cumplimiento ser madre?
Frases como “¿A qué esperas?”, “Se te va a pasar el arroz” son pronunciadas por personas de nuestro alrededor y, si te das cuenta, casi siempre en singular y poniendo el foco sobre la mujer. Esta invasión de la privacidad es parte de las presiones sociales que reciben las mujeres cuando deciden posponer la maternidad o toman la determinación de no ser madres.
Sin duda alguna, en la sociedad en la que vivimos hay una tremenda presión sobre la maternidad, ya sea si eres del “bando” que apuesta por la maternidad o del contrario que decide no integrarlo en su vida. Ahora bien, aún en silencio existe un gradiente importante de mujeres que desean ser madres pero no pueden por diversos motivos.
Aquí es donde se incrementa una presión interior que suele desembocar en problemas de ansiedad, estrés intenso, obsesiones, rumiaciones, trastornos depresivos, ataques de pánico, etc. Esto no solo afecta a su bienestar general sino que afecta directa y negativamente ante el hecho de poderse quedar embarazada.

Creencias sobre ser madre en la sociedad
Existe la creencia de que la mujer debe ser madre para ser feliz y tener una vida plena. Como sociedad, pensamos y valoramos sobre ciertos temas sin haber sido cuestionados por uno mismo: ¿Has hecho preguntas sobre maternidad? ¿Te han hecho? ¿Cómo te has sentido?
Es más, te diré que la maternidad se ha asociado a menudo con generosidad, ternura, afectividad, etc, y el deseo de no ser madre con ser egoísta, insensible, como si ser madre fuese una meta para alcanzar la bondad plena.
Según la Real Academia Española, ser egoísta es: ‘’que antepone el interés propio al ajeno, lo que suele acarrear un perjuicio a los demás’’ quien decide no ser madre es consciente de sus prioridades, limitaciones y gustos. Sabe que la persona que nace necesita cuidados, que no están predispuestos a aceptar por diversos motivos. Ahora: ¿de verdad consideras que no querer ser madre es egoísta?
Tú eres la única persona que puede tomar la decisión
Tú eres la única persona que puede tomar la decisión. No desear ser madre puede tener numerosos motivos:
- Decido no querer asumir una responsabilidad extra.
- Prefiero anteponer otras prioridades (crecimiento profesional, disfrute, viajes, etc.).
- Siento miedo al no sentirme preparada.
- Dificultades notorias a la hora de conciliar la vida laboral con la maternidad.
- Tengo motivos económicos importantes que me impiden afrontar una maternidad.
Ante esta presión social, te animamos a revisar estas pautas que pueden servirte de acompañamiento:
- No presiones a quien ha tomado una decisión que no te influye.
- Respeta las decisiones.
- No digas que se va a perder la mejor etapa de la vida, no es así, solo tiene unas prioridades distintas a las tuyas.
- No pidas explicaciones, no son necesarias.
Es cierto que, la decisión de no tener hijos poco a poco se ve más aceptada y respetada en todo el mundo. Teniendo ya su concepto en inglés “childfree” o “libre de hijos” en español, un movimiento a favor de no tener hijos por elección propia.

¿Qué dicen las estadísticas?
Según los datos estadísticos de fecundidad del año 2018, el motivo más relevante por el que las mujeres que no tienen hijos es porque no desean ser madres.
Para las menores de 25 años, el motivo más significativo es que son demasiado jóvenes para tenerlos.
Recuerda: «La maternidad es una opción, no una obligación’’.